martes, 1 de diciembre de 2009

LA CONCEJAL BARBUDA (Autor: Paco Robles)

Este fin de semana volvieron a bloquearse las centralitas de las principales cancillerías europeas por un asunto relacionado con el Ayuntamiento de Sevilla. Angela Merkel sufrió un ligero desvanecimiento cuando se enteró de que Maribel Montaño no saldría en la cabalgata de Carmona encarnando al Rey Gaspar. Obama se apresuró y llamó al turco Erdogan para que pusiera paz en su entorno: no era plan de que Irak, Irán o Afganistán se tomaran la noticia por la tremenda y vieran en esta actitud un desafío a los Reyes de Oriente que alegran la Epifanía de pequeños y mayores. La noche del sábado fue crucial. El mundo vivió pendiente de un hilo. Mejor dicho: pendiente de la barba postiza que Maribel Montaño no estaba dispuesta a llevar para reivindicar su feminismo cabalgatero.
Unos dicen que la peña La Giraldilla, organizadora de la cabalgata, pensaba dar marcha atrás y despojar a la concejal Montaño de sus atributos regios. Otros afirman que fue la propia Maribel quien presentó su renuncia, algo inaudito a lo largo de la historia: ¿desde cuándo dimiten los Reyes Magos? Sea como fuere, la delegada de Cultura y portavoz del Ayuntamiento de Sevilla se permite estas licencias que ocupan buena parte de su tiempo gracias a la ausencia de problemas en la ciudad. A la vista está. Los vecinos de Torreblanca salen a la calle para celebrar lo bien que los trata IU, los de Triana hacen lo propio para agradecerle al concejal Moriña que esté cargándose el barrio, y los taxistas colapsan las principales arterias que aún le quedan a la ciudad de los peatones para que la gente disfrute del cochecito de San Fernando. Si Mercasevilla es un modelo de gestión transparente, si no se ha encontrado una sola factura dudosa en la Granja de San Francisco, si todo va sobre ruedas como las carrozas de los Reyes, ¿por qué no puede permitirse doña Maribel su feminismo de paripé?
En Carmona ya han nombrado al sustituto de Gaspar o de Gasparesa. En Sevilla ocurrirá dentro de poco algo parecido. Cuando Monteseirín ha visto las barbas de Maribel cortar, ha puesto las suyas a remojar, no vaya a ser que se las afeiten a cuchilla… o cortándoselas con el as de Espadas que Viera se guarda en la manga. No obstante, es una pena que Montaño no haya salido de reina maga. ¡Lo que habría dado más de uno por disfrazarse de Estrella de la Ilusión! Aunque en ese caso iría más bien de Cometa Ilusionado por aquello de la cola…

Moda Cofrade: Temporada primavera 2010